Educación para la convivencia

Educación para la convivencia:

El ser humano es un ser sociable por naturaleza. En la sociedad en la que vivimos tenemos que relacionarnos unos con otros, por este motivo debemos entender las diferentes relaciones que tienen lugar entre los individuos, ya que pueden ser muy diversas.
Necesitamos conocer mejor las relaciones que se establecen entre los seres humanos y la tolerancia que se debe tener en determinadas situaciones.
En cuanto a los sentimientos, se les debe dedicar también la importancia que les corresponde, y explicar a nuestros alumnos que es normal sentirse de determinadas maneras en algunas situaciones, y el estilo asertivo frente a determinadas situaciones.




Como futuros docentes, se nos hace necesario la definición de conceptos tales como convivencia, conflicto, tolerancia, conducta antisocial, conducta disruptiva y disciplina ya que nos encontraremos en muchas ocasiones con situaciones donde debemos saber como actuar y que hacer frente a determinadas eventualidades.

Convivencia: es la construcción continuada de unas relaciones interpersonales satisfactorias, por el control de las propias emociones, la comprensión de los puntos de vista de los demás y el ejercicio de las conductas altruistas.

Conflicto: es aquella situación de las relaciones interpersonales en que una parte reclama a la otra un cambio de comportamiento.

Tolerancia: reconoce que todos somos iguales y que el medio-ambiente es el ámbito vital donde existimos con dignidad. Existen dos tipos de tolerancia:
Tolerancia fundamental: que consiste en respetar las diferencias.
Tolerancia activa: consiste en allanar las diferencias. 

Conducta antisocial: Es un tipo de comportamiento que se salta, rompe o viola las normas del grupo (o de la sociedad). 

Conducta disruptiva: Es el comportamiento fastidioso de quien quiere llamar la atención, por problemas personales de afecto, rendimiento, u otras carencias.

Disciplina: Es la manera en que una persona o un grupo organiza su tiempo, su espacio, sus actividades, sus relaciones…



La educación en valores con la familia

La educación en valores es un aspecto muy importante para la escuela, pues convierte la enseñanza en un aprendizaje más dinámico y útil para los alumnos, tanto para solventar situaciones cotidianas que les surjan a lo largo de su vida, como para su desarrollo cognitivo-emocional. Pues si se realiza adecuadamente, el niño/a se "empapará" de todos esos valores positivos que les transmite el maestro/a en el día a día de la clase. Ahora bien, del mismo modo que se trabaja esta educación en la escuela, se debe reforzar en los hogares también, pues si la familia posee y muestra esos mismos valores que se imparten en la escuela, los alumnos adquirirán dichos conceptos y "formas de ser" de una manera más fácil y común.

David Isaacs expresa en su libro La educación de las virtudes humanas, tal cita: "Creo que a todos los padres de familia les gustaría que sus hijos fueran ordenados, generosos, sinceros, responsables, etcétera. Pero existe mucha diferencia entre un deseo difuso que queda reflejado en la palabra ojalá y un resultado deseado y previsto, y alcanzable. Si la formación de los hijos en las virtudes humanas va a ser algo operativo, los padres tendrán que poner intencionalidad en su desarrollo. Para ello hace falta estar convencido de su importancia. Hay que aprovechar la cotidianidad de la vida en familia, pero se necesita aumentar la intencionalidad respecto del desarrollo y reflexionar sobre dos aspectos: la intensidad con la que se vive y rectitud de los motivos al vivirla".


Diferencias individuales como origen de conflictos:

·         Constitución genética: la existencia de variación genética es una condición necesaria para que haya evolución, pero desgraciadamente, en algunos momentos  puede llegar a ser origen de un conflicto.
·         Educación recibida: depende de la educación que te transmitan tus padres, de tu condición social y del entorno donde te socialices.
·         Metas y necesidades: depende de las metas que uno quiera alcanzar, tendrá ciertas necesidades a las que acceder. Por ello pensamos que este concepto es muy ambiguo, porque cada persona tiene diferentes metas y necesidades.
·         Visión de la realidad: no todos poseemos la misma visión de nuestro mundo ni de lo que nos rodea, depende de muchos factores sociales y personales.
·         Recursos personales: está ligado a los recursos materiales, a las expectativas que tenga, a tus metas y visión de la realidad.




La convivencia en la escuela:

La convivencia es un aprendizaje: se enseña y se aprende a convivir. Por ello, la convivencia escolar es la particular relación que se produce en el espacio escolar entre los diversos integrantes de la comunidad educativa: estudiantes, docentes, directivos, asistentes de la educación, padres, madres y apoderados, sostenedores.

En el espacio escolar, la convivencia se enseña, se aprende y se refleja en los diversos espacios formativos (en el aula, en los talleres, las salidas a terreno, los patios, los actos ceremoniales, la biblioteca), los instrumentos de gestión (el PEI, los reglamentos de convivencia, los Planes de Mejoramiento Educativo), y en los espacios de participación (Consejo Escolar, CCPP, CCAA, Consejo de Profesores/as, reuniones de apoderados/as), por lo que es de responsabilidad de toda la comunidad educativa.


Estrategias de resolución de conflictos

En una convivencia siempre está la posibilidad de que se produzca un conflicto, donde se reclame un cambio de comportamiento, se discrimine, no se respete, etc.

Las estrategias que existen para afrontar estos problemas y conseguir que se solucionen, son:
  1. Poseer un pensamiento causal (entender cuál es el problema y cómo se originó)
  2. Tener un pensamiento alternativo (que produzca diferentes soluciones)
  3. Realizar un pensamiento consecuencial (previniendo las consecuencias)
  4. Realizar un pensamiento de medios-fin (aportando los medios o las normas por las cual se puede llegar al fin deseado)
  5. Poseer un pensamiento de perspectiva (tener empatía)

Educación no competitiva, sí cooperativa

Un vídeo que resume perfectamente lo que debe ser la escuela hoy en día, con respecto a la convivencia es esta entrevista que le realizan a Francesco Tonucci, uno de los grandes psicopedagogos de la actualidad. Vale la pena verlo, si queremos reflexionar sobre qué contexto educativo es el que están recibiendo nuestros alumnos.



 Los derechos humanos:

Los derechos humanos son aquellas libertades, facultades, instituciones, o reivindicaciones relativas a bienes primarios o básicos que incluyen a toda persona, por el simple hecho de su condición humana, para la garantía de una vida digna, sin distinción alguna de etnia, color, sexo, idioma, religión, orientación sexual, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.





Nuestra sociedad está en continuo cambio debido a que en ella existe una gran diversidad de personas es por ello que los profesores deben transmitir a sus alumnos lo que dicta la ley, valores de tolerancia, respeto a los demás, y civismo democrático, así como los cambios que se producen en ellas. Además, la escuela debe ser un lugar de respeto hacia los Derechos Humanos, donde haya una cultura participativa. Así, la Educación en Derechos Humanos, va más allá de las materias que tienen en su Currículo y debe aparecer de forma transversal.
Las Interrelaciones:
La coexistencia: Existencia simultánea de dos o más entidades. Simplemente hay que saber estar con el otro, no ofender a nadie, ni insultar y tener respeto. El saber estar es una de las primeras cosas que deberíamos llevar a la escuela evitando así ser impertinente. No ha existido como asignatura o área pero siempre ha estado presente en la educación en valores.

Ciudadanía: yo coexisto pero puedo dar un paso más y entablar relaciones con otros como ciudadanos, que vendrán marcados por los derechos humanos y por el estado de derecho donde uno convive. Esto implica cuestiones diferentes, si antes decíamos que la coexistencia nos pide saber estar ahora la condición ciudadana me pide respetar los derechos de ambos.

Convivencia: convivir es ejercicio de la actividad que se deriva de vivir juntos para ayudarnos mutuamente, ya que somos seres sociales. Hay convivencias negativas y positivas en las escuelas se trabaja más la negativa para evitar conflictos, se debe trabajar la positiva también. Este es otro paso más que la coexistencia y la condición humana.

Encuentro: Se da cuando se pone en ejercicio el crecimiento de dos libertades, y el YO y el TU sin dejar de ser YO y TU se produce en dos libertades diferentes.


Conceptos que se tienen que tener en cuenta para la Educación para la ciudadanía:

Yo/persona/individuo. Autotranscendencia: sea cual sea el concepto de educación no se puede hablar de educación sin tener en cuanta desarrollo y formación integral del niño. Se me quedaría corta la formación del niño si no le ofrezco la oportunidad de transcenderse, y no me refiero al tema religioso, sino a la transcendencia en general. El ser humano puede transcender lo material para también vivir en otro contexto llámalo religioso, espiritual... esa concepción materialista no nos convence, a toda persona se le debe ofrecer un paso más a lo meramente natural, abrir la posibilidad de que ese ser humano también si quiere pueda desarrollar su yo más allá de lo puramente material a eso nos referimos con auto-transcendencia. Por ejemplo el altruismo (médicos sin fronteras) no les obliga nadie, lo hacen por un concepto de solidaridad, no por un concepto material. Un profesor debe decirle a un niño como educador, al margen de cumplir la ley también esta posibilidad. Formación integral para los niños es esto, si no podemos hablar por ejemplo de religión pues no trabajamos la formación integral. Como educadores que creemos en la formación integral debemos mostrar la auto-transintegral. Como educadores que creemos en la formación integral debemos mostrar la auto-transcendencia.
El otro: si yo me considero así pero no considero a los otros de esta manera (cuando unos se creen más que otros). Hay un concepto de yo que no se aplica a los otros (quiere que yo le trate a el de una forma pero él a mí de otra forma). Por ejemplo entre las parejas, que una no deja que la otra salga de fiesta. Esto condiciona las relaciones sociales lógicamente. Difícilmente se podrá de hablar de convivencia, de ciudadanía…

Los otros: yo puedo tener un concepto de yo y del otro, pero si yo además pertenezco a un colectivo determinado (el aula, la familia, mi pueblo, mi país...) también tendría que tener en cuenta que es lo que significa ese grupo para mí y como soy yo en ese grupo. ¿Con que grupo social comparto mi yo? Porque a lo mejor tendría que entrar en unas relaciones diferentes porque no se trata solo del tu y yo, contigo puedo ceder de una manera pero con el grupo de otros. ¿Nos consideramos canarios? Es muy importante la conciencia de pertenencia. Tengo que preguntarme a qué grupo pertenezco y que representa o significa para mí.

Lo otro: es el medio ambiente (lo tocaremos más adelante) tengo que tener claro quién soy, quien es el otro para mí, donde pertenezco y el lugar y el momento donde estoy.


Igualdad de género en la escuela: ¿Cómo trabajarla en el aula?:

Los diferentes comportamientos, necesidades de hombres y mujeres se deben valorar y promover de la misma manera. Cuando hablamos de esto hablamos de igualdad de oportunidades, es decir, hombres y mujeres tienen las mismas oportunidades y posibilidades.
Un futuro educador tiene que enseñar a que el niño se encuentre con su sexualidad tanto biológica como psicológica. A partir de ahí, el profesor no debe tener estereotipos únicos ni aplicables a todo el mundo, debe ayudar en mayor medida de lo posible al alumno. Ya que la mayoría de la sociedad hace una clasificación dicotómica únicamente entre hombres y mujeres y debemos recordar que existen casos como la feminidad/masculinidad externa que difiere del propio “sexo genérico” de las personas y que nos sitúa ante reconocidas formas de entender la sexualidad: heterosexualidad, homosexualidad, bisexualidad, asexualidad, pansexualidad, transexualidad, hermafroditas, etc. Es por ello que todas estas formas de entender la sexualidad deben darse en la escuela ya que debemos de entender y promover la igualdad entre las personas.
En la escuela, también debemos tratar el tema de la equidad de género. Hombres y mujeres no son iguales. Hay trabajos que son incompatibles con el hecho de ser mujer (normalmente por su condición de madre), aunque si esa no es tu prioridad debes tener las mismas posibilidades.


Por tanto podemos decir que se debe trabajar la igualdad y la equidad en la escuela.




Educación para la convivencia y la paz:

La educación para la convivencia y la paz es un proceso que implica acciones intencionales, sistemáticas y continuas encaminadas al desarrollo personal y colectivo mediante marcos que generen formas alternativas de pensar, sentir y actuar. Este proceso supone potenciar la capacidad para afrontar los conflictos desde una perspectiva creativa y no violenta y vivir conscientemente los valores de igualdad, justicia, respeto, libertad y solidaridad.


Los objetivos de la Educación para la Convivencia y la Paz se plasman en las dimensiones de la misma:

  1. Desarrollo personal: adquirir las habilidades personales (autoconocimiento, autoestima, autonomía, y autocontrol) y sociales (empatía, asertividad, escucha activa, trato respetuoso, toma de decisiones) necesarias para tener unas relaciones interpersonales y sociales constructivas y pacíficas.
  2. Derechos humanos: Conocer los derechos humanos, analizar las condiciones para ejercerlos y reconocer las situaciones de injusticia, discriminación, opresión y violencia en diferentes contextos, específicamente por razones de género, de raza, de situación socioeconómica, de cultura.
  3. Valores democráticos: comprender el sentido y aprender prácticamente la igualdad, la libertad, la participación, la solidaridad, la justicia, la compasión... como valores que constituyen la base de una sociedad en paz.
  4. Promoción de la convivencia en contextos cercanos, como la familia, el centro escolar, el grupo de amistad, el barrio o el pueblo...
  5. Tratamiento de los conflictos: aprender teórica y prácticamente estrategias para facilitar el dialogo y la negociación, resolver los conflictos... como herramientas para la construcción de la convivencia positiva y de la paz.
  6. Desarrollo: analizar de forma crítica el modelo actual de desarrollo y sus consecuencias, así como de la explotación de los recursos naturales y los desastres ecológicos.
  7. Interculturalidad: aprender a dialogar entre culturas desde la afirmación de la cultura propia y el respeto a todas las demás culturas como un modo de convivencia pacífica entre personas y pueblos.
  8. Conflictos nacionales e internacionales y procedimientos para su solución: conocer y analizar los principales conflictos, así como de los modelos utilizados, posibles y deseables para su solución. Analizar las guerras y el abuso del poder como vías violentas e injustas de solución de conflictos.



¿Qué es la tolerancia?

la tolerancia es el respeto a las opiniones, ideas o actitudes de los demás, aunque no coincidan con las propias: la tolerancia es indispensable para la convivencia.
a continuación, veremos un vídeo muy útil para que los alumnos de Educación Primaria puedan entender dicho término de una forma dinámica y divertida:




Conceptos y actitudes que hay que abordar en el tema de la Igualdad de Género


  • Coeducación: Es una educación en igualdad para la igualdad.
  • Corresponsabilidad doméstica: Reparto equitativo de las responsabilidades entre hombres y mujeres.
  • Discriminación de género: No se otorgan iguales derechos, responsabilidades y oportunidades a hombres y mujeres.
  • Estereotipo sexual: Construcción cultural que un grupo o una sociedad asigna a hombres y mujeres, estableciendo para cada sexo distintos papeles, actitudes, comportamientos y características.







DIDÁCTICA DE LA EDUCACIÓN PARA LA IGUALDAD DE GÉNERO
¿Cómo trabajar la igualdad de género en las aulas?

Lo primero que hay que tener claro es la diferencia entre educación sexual y educación para la igualdad de género, mientras que la educación sexual se refiere a las características biológicas y fisiológicas que diferencia los varones de las mujeres, es decir desde el punto de vista sexual y por educación para la igualdad de género; nos referimos al estado psicológico que refleja el sentimiento interior de ser hombre o mujer. El término género nos permite explicar diferencias psicológicas sociales entre mujeres y hombres.


Los diferentes comportamientos, necesidades de hombre y mujeres se deben valorar y promover de la misma manera. Cuando hablamos de esto hablamos de igualdad de oportunidades, es decir, hombres y mujeres tienen las mismas oportunidades y posibilidades.
Un futuro educador tiene que enseñar a que el niño se encuentre con su sexualidad tanto biológica como psicológica. A partir de ahí, el profesor no debe tener estereotipos únicos ni aplicables a todo el mundo, debe ayudar en mayor medida de lo posible al alumno. Ya que la mayoría de la sociedad hace una clasificación dicotómica únicamente entre hombres y mujeres y debemos recordar que existen casos como la feminidad/masculinidad externa que difiere del propio "sexo genérico" de las personas y que nos sitúa ante reconocidas formas de entender la sexualidad: heterosexualidad, homosexualidad, bisexual, etc. Es por ello que todas estas formas de entender la sexualidad deben darse en la escuela, ya que debemos de entender y promover la igualdad entre personas.
En la escuela, también debemos tratar el tema de la equidad de género. Hombres y mujeres no son iguales. Hay trabajos que son incompatibles con el hecho de ser mujer (normalmente por su condición de madre), aunque si esa no es tu prioridad debes tener las mismas posibilidades.
Por tanto, podemos decir que se debe trabajar la igualdad y la equidad en la escuela.



Interculturalidad, discriminación y racismo

El aula y el centro educativo constituyen pequeñas comunidades que reproducen las relaciones sociales, los enfrentamientos, la capacidad de diálogo, la integración o no de los miembros ... de la sociedad a la que pertenecen. Los docentes podemos ser meros "reproductores" o verdaderos agentes de cambio, de transformación. Por ello, los profesionales debemos plantearnos que la institución escolar debe cambiar, aún más, tiene que pasar de una estrategia reactiva a otra proyectiva, que se debe plantear el futuro social de convivencia intercultural.

Propuestas de intervención en el tratamiento de conflictos

Por otra parte, la propia dinámica escolar y sus interacciones da lugar a divergencias que pueden ser oportunidades para avanzar o retroceder en la convivencia, según cómo las afrontemos (el hecho de no afrontarlas dará lugar a un proceso creciente de incomunicación, desconfianza, temores, malentendidos, etc)
Por tanto, como parte esencial de esta convivencia en la diversidad, debe estar presente en la normal actividad de la clase el aprendizaje y uso de estrategias dirigidas a este fin, tales como:

   - Análisis de las situaciones conflictivas
   - Escucha activa
   - Negociación
   - Mediación
   - Toma de decisiones por consenso

  - Creación en el grupo de un ambiente de confianza y cooperación etc.

Habilidades sociales y de relación interpersonal

La convivencia en paz y libertad precisa de sujetos capaces de llevarla a cabo. No cualquiera está preparado para ello sino únicamente aquellos que han realizado un recorrido de aprendizaje y maduración como personas. El primer paso será un conocimiento sincero y profundo de nosotros mismos, nuestros valores, fortalezas y debilidades así como el reconocimiento de su procedencia: percibirnos como el cruce mestizo de las aportaciones de muchas personas y encuentros.
Es tarea de todos, y también nuestra, saber descubrir qué actitudes están enterradas en el fondo de nuestros corazones, cuál es el humus sobre el que está creciendo nuestra sociedad y erradicar los posibles motivos de separación y desconfianza. Será necesario que entre todos, los que vienen ahora y los que llegamos hace más tiempo, cultivemos (etimológicamente, cultura se relaciona con la acción de cultivar) valores de fraternidad, libertad, justicia, solidaridad, etc. Valores que nos permitan edificar una verdadera convivencia.
Una terapia sana puede ser intentar ponerse en la piel del otro, en las circunstancias tanto del que llega como del que está. Para ello son aspectos centrales:

-- Conocer las propias emociones para relacionarnos positivamente con nosotros mismos y con los otros;
--   Aprender a manejar esas emociones;
--   Reconocer las emociones de los demás, porque éste es un paso previo para situarnos en la perspectiva del otro, sentir lo que siente el otro;
--   Cultivar la escucha, comprender no sólo lo que otros dicen, sino también sus sentimientos y deseos;
--  Ejercitarse en la planificación y realización de actividades grupales: aceptar normas, articular los objetivos propios con los de otros miembros del grupo respetando puntos de vista diferentes y asumiendo las responsabilidades que correspondan;
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Lo contrario a esta perspectiva conduce a una sociedad a la defensiva, que busca soluciones basándose en el miedo, es decir, en el criterio de la fuerza o del dominio. Alcanzamos así una falsa convivencia; cada uno vive al lado del otro, pero se han creado nuevas fronteras: una calle, un barrio, una pandilla. Este tipo de sociedad no genera paz.



1 comentario:

Unknown dijo...

Agradecemos poner los créditos a la última ilustración perteneciente a Fundación Entre Niños, www.entreninos.org, artista: Paulina Leyton.